Dolores Espinosa se hace eco de la situación desesperada de este colectivo que desde hace 9 meses no puede ejercer su actividad debido a las restricciones decretadas por el Gobierno estatal y el regional para combatir la Covid-19
La concejala recuerda que ahora es más urgente si cabe el acuerdo adoptado a fines de noviembre en el Pleno municipal para instar al Cabildo a incluir a los feriantes en sus subvenciones para las empresas vinculadas a las fiestas populares suspendidas
La edil advierte de las «ruinosas» consecuencias que para este colectivo tiene la cancelación de las ferias de Navidades y las previsibles restricciones en los próximos Carnavales, por lo que la única esperanza para muchos feriantes es acogerse a ayudas públicas extraordinarias
17 diciembre de 2020. Dolores Espinosa, concejala de Unidas Podemos (Izquierda Unida-Podemos-Equo), pide al Ayuntamiento que, con carácter urgente, conceda unas ayudas económicas extraordinarias a los feriantes, debido a que se quedarán sin posibilidad de ingresos en estas Navidades tas las nuevas medidas contra la pandemia decretadas por el Gobierno de Canarias en Tenerife, una de las cuales es precisamente la suspensión de todas las ferias programadas entre el 19 de diciembre y el 1 de enero.
Espinosa recuerda que Unidas Podemos, a través de su portavoz municipal, Ramón Trujillo, ya llevó al Pleno de noviembre pasado la situación desesperada de este colectivo y se aprobó por unanimidad adoptar las medidas necesarias para que los autobares y quioscos tengan actividad estas Navidades, pero las restricciones impuestas para rebajar la incidencia del Covid-19 hacen ya imposible este objetivo.
Por ello, la única forma de ayudarles en estos momentos es habilitar subvenciones urgentes que les permitan sobrevivir en las próximas semanas y meses, puesto que una parte importante de sus ingresos anuales los obtienen en las ferias navideñas y del Carnaval.
El otro punto de ese acuerdo plenario es ahora más perentorio si cabe, el de «instar al Cabildo de Tenerife a incluir al colectivo de feriantes como beneficiario de las subvenciones culturales a las orquestas y empresas vinculadas a las fiestas populares y, asimismo, incrementar la partida presupuestaria prevista para poder acoger nuevos demandantes».
Espinosa advierte del «duro golpe que supone para la economía de estas personas la suspensión de la tradicional feria de Santa Cruz en Navidades, así como todas las demás en la isla, puesto que para ellas llueve sobre mojado, ya que algunas no han podido trabajar desde justo después de los pasados Carnavales, cuando en marzo se decretó el confinamiento, quedándose con poco más de 400 euros mensuales, por cese de actividad en autónomos, que apenas les permite abonar la cuota de cotización a la Seguridad Social». Y así lo dejó claro el presidente del Colectivo de Feriantes de Canarias (Coferca), Santiago Martín Barreto, hace tres semanas en su intervención ante el pleno del Ayuntamiento.
Como ya defendió Unidas Podemos en esa moción, «el temor de buena parte de los feriantes, que han contribuido a dar vida a nuestras fiestas tradicionales, es sucumbir a una ruina inminente si no logran generar actividad suficiente para obtener algún nivel de ingresos».
Su esperanza ahora, además de las ayudas extraordinarias públicas que puedan recibir, es la de que en los primeros meses de 2021 puedan reanudar su actividad, con la feria del Carnaval, pero la situación epidemiológica tampoco permite vislumbrar que en tan corto plazo puedan recuperar un nivel mínimo de ingresos.