Reglas del monopoly normal

El Monopoly es un juego de mesa basado en el comercio y la inversión inmobiliaria. Se juega con un tablero, fichas y dinero. El objetivo del juego es amasar la mayor cantidad de dinero posible, y el último jugador en quiebra es el perdedor. Los jugadores comienzan el juego con una suma de dinero, y avanzan por el tablero girando un dado. Al caer en ciertas casillas, los jugadores deben pagar impuestos, cobrar renta o realizar otras acciones. El juego termina cuando un jugador queda en bancarrota.

Comprar propiedades - Al caer en una casilla de terreno libre, los jugadores pueden comprar esa propiedad por su precio de compra. Si un jugador cae en una propiedad que ya está comprada por otro jugador, entonces debe pagar al propietario una renta. La renta se paga de acuerdo con el número de casillas de la misma propiedad que el propietario posea. También hay propiedades especiales que no se pueden comprar, pero que pueden ser utilizadas para cobrar o pagar cuotas.

Pagar impuestos y multas - Si un jugador cae en una casilla de impuestos, debe pagar al banco la cantidad indicada. Si cae en una casilla de multa, debe pagar la multa indicada al banco. Si no tiene suficiente dinero para pagar, entonces debe vender propiedades para cubrir el costo.

Ir a la carcel - Si un jugador cae en una casilla de carcel, entonces debe permanecer allí hasta que pague la multa de salida o consiga una carta de salida de la carcel. Si un jugador cae en la casilla de carcel sin haber cometido ningún delito, entonces puede salir de la carcel pagando la multa de salida.

Cobrar renta - Si un jugador cae en una propiedad que pertenece a otro jugador, entonces debe pagarle al propietario una renta. La renta se paga de acuerdo con el número de casillas de la misma propiedad que el propietario posea.

Cobrar o pagar cuotas - Si un jugador cae en una propiedad especial, debe cobrar o pagar la cuota indicada. Las propiedades especiales son aquellas que no se pueden comprar, pero que pueden ser utilizadas para cobrar o pagar cuotas.

Comprar casas y hoteles - Si un jugador tiene una propiedad con un número suficiente de casas, entonces puede comprar un hotel para esa propiedad. Los hoteles se colocan en la propiedad y aumentan la renta que se debe pagar al caer en ella. Los jugadores deben tener en cuenta que sólo pueden colocar un hotel en cada propiedad, y que no pueden colocar más de cinco casas en total en todas sus propiedades.

Vender propiedades - Si un jugador necesita dinero, puede vender propiedades a otros jugadores. El jugador recibe el precio de venta indicado en el tablero por la propiedad, y el comprador se convierte en el nuevo propietario. Los jugadores también pueden vender casas y hoteles, pero deben recibir sólo la mitad del precio de venta indicado en el tablero.

hipotecar propiedades - Si un jugador necesita dinero, también puede hipotecar propiedades. Al hacerlo, el jugador recibe el precio de hipoteca indicado en el tablero por la propiedad, y la propiedad queda hipotecada. Una propiedad hipotecada no puede ser utilizada para cobrar renta, y el jugador no puede venderla o hipotecarla nuevamente. Para deshipotecar una propiedad, el jugador debe pagar al banco el precio de hipoteca más una cantidad adicional.

Cambiar de propietario - Si un jugador no puede pagar una deuda, entonces debe cambiar de propietario. El jugador que adquiere la deuda se convierte en el nuevo propietario de todas las propiedades del jugador que ha cambiado de propietario. Si el jugador que adquiere la deuda no puede pagarla, entonces debe cambiar de propietario nuevamente, y así sucesivamente hasta que la deuda sea cancelada o hasta que no haya más jugadores en el juego.

Quiebra - Si un jugador no puede pagar una deuda, entonces está en bancarrota. El jugador pierde el juego, y todas sus propiedades son vendidas para pagar sus deudas. El jugador que adquiere la deuda se convierte en el nuevo propietario de todas las propiedades del jugador que ha cambiado de propietario. Si el jugador que adquiere la deuda no puede pagarla, entonces debe cambiar de propietario nuevamente, y así sucesivamente hasta que la deuda sea cancelada o hasta que no haya más jugadores en el juego.

Fin del juego - El juego termina cuando un jugador queda en bancarrota. El último jugador en quiebra es el perdedor.

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